wtorek, 27 kwietnia 2010

Receta de tortilla de chorizo y pimientos asados

La tortilla se puede hacer de muchas formas; la tradicional es la tortilla de patatas, pero también se le pueden añadir unos trozos de chorizo y queda riquísima. En esta ocasión la receta es de tortilla de patatas con chorizo y pimientos asados.

Ingredientes necesarios:

6 huevos
1 cebolla
3 patatas medianas
1 pimiento rojo asado
1 chorizo fresco dulce
aceite y sal

Cómo se prepara:

Para hacer esta tortilla podremos aceite en una sartén grande o mediana y echamos las patatas ya cortadas y laminadas con un poquito de sal. Cuando estén medio fritas le añadimos la cebolla bien picada y el chorizo troceado. Y casi al final le añadimos los pimientos asados (en el horno 20 minutos y después quitada la piel y cortados).

Por otra parte batimos los huevos con una pizca de sal y aquí vertemos el contenido de la sartén; se mueve bien y cocinamos la tortilla hasta que esté cuajada a tu gusto, mejor a fuego lento.

piątek, 23 kwietnia 2010

Los repápalos.




Ingredientes (4 personas):
6 huevos

4 rebanadas de pan

4 dientes de ajo

1 cebolla
1 rama de perejil

1 cucharón de aceite de oliva

Sal

1 hoja de laurel



Preparación de la Receta Repápalos:
Paso 1: Se pelan los ajos y uno se pica y los otros se cortan en juliana. Se reservan.

Paso 2: Se pica el perejil. Se reservan.

Paso 3: Se baten los huevos. Se reservan.

Paso 4: Se desmigan las rebanadas de pan.

Paso 5: Se cortan las cebollas en juliana y se reservan.

Paso 6: Se mezcla uno de los ajos picados, con la 1/2 del perejil, la miga de pan y los huevos batidos. Se trabaja bien, para que quede una masa homegénea y bien trabajada. Debe de quedar bien espesa. Si no quedara así, se añade más miga de pan.

Paso 7: Se hacen unas albondigas o repápalos con esta masa y se fríen en aceite de oliva. Al sacarlos póngalos en la cazuela donde vaya a hacer el guiso.

Paso 8: En esa misma sartén se hace un sofrito con la cebolla, los ajos en juliana y el resto del perejil.

Paso 9: Se añade la hoja de laurel y se deja hasta, que el sofrito esté terminado.

Paso 10: Se añaden dos cucharones de agua al sofrito y se le deja cocer 5 minutos.

Paso 11: Luego se añade el sofrito sobre los repápalos y se deja cocer todo junto durante 20 minutos más.

Las sopas españolas

En primavera, cuando aparecen muchas verduras frescas vale la pena preparar una sopa. He puesto algunos ejemplos de recetas que me perecen las más interesantes.


Crema de Calabaza


Ingredientes (para 4 personas):
1 calabaza de kilo 1/2 mas o menos
1 cebolla grande
un cascarón de pollo (o restos del mismo)
1 pastilla de caldo de pollo (optativo)
1 kilo de mejillones.
1 litro de agua

Preparación:

Paso 1: Se hierven los huesos del pollo solos, a continuación se le añade la cebolla partida y la calabaza a trozos con la pastillita de caldo. Poca sal pues la pastilla ya sala.

Paso 2: Cuando ya esta cocida se sacan los huesos y se pasa por el turmix. Debe quedar muy espesa.

Paso 3: A continuación bien limpios los mejillones, se abren en cazuela tapada al fuego al vapor. El caldo que sueltan se cuela y se añade a la crema, y naturalmente también los mejillones.




Crema de Salmorejo

Ingredientes (para 6 personas):
1 kg. de pan de miga dura
1 octavo de litro de aceite de oliva virgen
1 kilo de tomates maduros
2 dientes de ajo
Aceite de oliva
Sal al al gusto
3 ó 4 cucharadas de vinagre de vino


Preparación:

Paso 1: Se humedece el pan y se corta en pedazos pequeños antes de meterlo en el triturador con los tomates pelados, el aceite de oliva, los ajos, la sal y el vinagre.

Paso 2: Se tritura todo bien y después hay que esperar entre 20 y 25 minutos, hasta que se forme una crema.

Paso 3: Se le puede añadir huevo duro y jamón serrano (vegetarianos abstenerse). Se sirve frío.

Una buena alternativa al gazpacho andaluz, para variar.

wtorek, 20 kwietnia 2010

Guacamole

El guacamole es una antigua receta procedente de México. Con esta receta se puede elaborar una autentica salsa guacamole que se puede acompañar con nachos o tortillas fritas.



Ingredientes para 4 personas:
Aguacates: 2 grandes y maduros
Tomate: 200 gramos
Cebolla: 1 pequeña
Chiles: 3
Cilantro fresco y troceado: 1 pellizco
Sal: 1 pellizco
Pimienta: 1 pellizco
Azúcar: 1 pellizco

Preparación:

Tiempo estimado: 7 minutos
Se trocea cuidadosamente el aguacate para que no se forme una pasta. Se pone en un recipiente y se mezcla con el resto de los ingredientes previamente picados y sin pepitas, excepto el azúcar que se reserva para después
Cuando están todos los ingredientes en el recipiente, se remueve cuidadosamente hasta obtener una masa homogénea
Se corrige el punto de sal y pimienta y, en caso de ser ligeramente ácido, se le agrega el pellizco de azúcar
Es preferible consumir inmediatamente esta salsa ya que el aguacate se oxida rápidamente en contacto con el aire. Para evitar que el aguacate se oxide y ennegrezca, se puede regar con unas gotas de jugo de limón

piątek, 16 kwietnia 2010

La fabada asturiana.




Este es uno de esos platos para cuando no te apetece cocinar, porque no hay que prestarle la más mínima atención, se echa todo en la pota y se deja que se haga sólo.

Ingredientes :


500 gr. de fabes asturianas.
2 chorizos.
2 morcillas.
350 gr. de panceta o tocino.
Una pizca de azafrán.
Sal.


Cómo Preparar Fabada Asturiana:
La noche anterior tendremos que dejar a remojo las fabes, el lacón y la panceta.

Ya el día de la faena ponemos a hervir en agua fría todos los ingredientes, a fuego lento, durante dos horas. En principio, hay quien dice que no se debe de interrumpir la ebullición, pero un cocinero asturisano que sale en la televisión dice lo contrario, que debemos añadir una pizca de agua fría cada 10 minutos para que salgan las fabes más "al dente". La realidad es que están más buenas sin dejar que entren en ebullición, pero también da trabajo, con lo que como prefieras, la diferencia tampoco es mucha.

Teniendo en cuenta que el embutido ya es salado yo no le echo sal, pero eso va en los gustos.

Si vas a cocinarlo en olla expres, el tiempo de coción será de 15 minutos a partir del momento en que la válvula comience a girar.

Este es uno de esos platos terríblemente agradecidos, porque se hacen solos y el resultado es genial.

wtorek, 13 kwietnia 2010

Vinos


Clasificación
Vinos de Pago

Es una de las novedades de la Ley de la Viña y el Vino. Es la categoría superior que puede alcanzar un vino y en ella se incluyen los caldos de reconocido prestigio y características climáticas y edafológicas distintivas de un “paraje” o “sitio rural” determinado. Su producción y comercialización vinícola seguirá un sistema integral de calidad que cumplirá, como mínimo, los requisitos aplicados a las Denominaciones de Origen Calificadas, y habrá de ser elaborado y embotellado en la bodega del pago o en el término municipal en que éste se encuentre.

Vinos con Denominación de Origen Calificada (DOCa)

Esta categoría está reservada a aquel vino que haya alcanzado altas cotas de calidad durante un dilatado periodo de tiempo. La primera denominación en conseguirlo fue Rioja, en abril de 1991.

Entre los requisitos necesarios para alcanzar este status se incluyen: que hayan pasado al menos10 años desde el reconocimiento como DO, que todos los productos amparados se comercialicen embotellados desde bodegas situadas en la zona de producción o que sigan un adecuado sistema cualitativo desde su organismo de control.

Vinos con Denominación de Origen (DO)

Los vinos con DO son vinos españoles de prestigio que proceden de un área de producción delimitada y son elaborados en función de unos parámetros de calidad y tipicidad, estando reglamentada cada DO por un Consejo Regulador que se encarga de velar por aspectos tan importantes como las variedades de uvas autorizadas, los rendimientos por hectáreas, las formas de elaboración o los tiempos de crianza. Para que un vino pueda ser amparado por la Denominación de Origen, la zona de producción deberá haber sido reconocida previamente, al menos con una antelación de 5 años, para la elaboración de vinos de calidad con indicación geográfica.

Vinos de Calidad con Indicación Geográfica

Es una calificación surgida igualmente a partir de la Ley de la Viña y el Vino. Son vinos elaborados en una región determinada, con uvas procedentes de la misma y cuya calidad, reputación o características se deben al “medio geográfico, al factor humano o a ambos, en lo que se refiere a la producción de la uva, a la elaboración del vino o a su envejecimiento. Se identificarán mediante la mención Vino de calidad de..., seguida del nombre del lugar donde se produzcan”

Historia de vinicultura
No existe una clara unanimidad sobre el lugar en el que comenzaron a realizarse los primeros cultivos de vid en España y quienes fueron los que introdujeron las técnicas de elaboración del vino. Diversas fuentes apuntan que los primeros viñedos se habrían asentado en el litoral sudoccidental andaluz constituyendo el punto de entrada y el lugar de las viñas más antiguas de España.


Esta teoría parece ser la más probable, y está avalada por la presencia de los fenicios en la península hace alrededor de 3.000 años. Este pueblo comerciante fundó un puerto en el sudoeste al que llamaron Gadir (Cádiz, en la actualidad). Después se trasladó tierra adentro, creando otra ciudad llamada Xera (ahora Jere en cuyas montañas circundantes plantaron vides. El clima cálido de la zona favoreció la naturaleza fuerte y dulce de los vinos, lo que les permitía soportar muy bien los viajes. Este hecho, unido al espíritu comerciante de los fenicios, supuso que ya en el comienzo de la era cristiana, los vinos españoles se convirtieran en una de las mercancías más comunes en los intercambios comerciales del Mediterráneo y norte de África.

Serían los romanos los que continuarían la producción de vinos en la península, para lo que incorporaron sus métodos particulares de elaboración. Entre ellos destaca la crianza en ánforas de barro situadas en estancias altas y soleadas, y cerca de chimeneas. Al parecer, los caldos obtenían así texturas, sabores y fragancias de frutas y flores e, incluso, ahumados muy apreciados. La necesidad de abastecer al vasto imperio y sus legiones contribuyó a intensificar el ya notable tráfico comercial que habían alcanzado los vinos españoles.

El declive del Imperio Romano y la posterior invasión bárbara supuso un freno en el desarrollo de la viticultura en España. Las primeras hordas germánicas destruyeron muchas plantaciones de vid. Posteriormente, la llegada de los visigodos a la península contrarrestó la acción de los bárbaros. Mucho más civilizados que sus predecesores por el contacto con los romanos en las provincias limítrofes del Imperio, concedieron una gran importancia a la viticultura.

La llegada de los árabes en el siglo VIII también se tradujo en algunas dificultades para el desarrollo de la vid y la elaboración del vino debido a la prohibición coránica de consumir bebidas fermentadas y alcohólicas. Pese a ello, el cultivo de la vid continuó e, incluso, se mejoró durante el periodo de dominación musulmana. La primera causa se encuentra en la propia uva como fruta y su zumo: no había motivos para prohibir su consumo ni tampoco el del mosto sin fermentar. Por lo tanto, no se podía impedir su cultivo, al menos para los no musulmanes. La segunda causa es la conocida permisividad de algunas dinastías más liberales hacia los cristianos dominados, a los que permitieron continuar con el cultivo de sus viñedos y la elaboración del vino, sobre todo en los monasterios.

No existe una clara unanimidad sobre el lugar en el que comenzaron a realizarse los primeros cultivos de vid en España y quienes fueron los que introdujeron las técnicas de elaboración del vino. Diversas fuentes apuntan que los primeros viñedos se habrían asentado en el litoral sudoccidental andaluz constituyendo el punto de entrada y el lugar de las viñas más antiguas de España.

Esta teoría parece ser la más probable, y está avalada por la presencia de los fenicios en la península hace alrededor de 3.000 años. Este pueblo comerciante fundó un puerto en el sudoeste al que llamaron Gadir (Cádiz, en la actualidad). Después se trasladó tierra adentro, creando otra ciudad llamada Xera (ahora Jere en cuyas montañas circundantes plantaron vides. El clima cálido de la zona favoreció la naturaleza fuerte y dulce de los vinos, lo que les permitía soportar muy bien los viajes. Este hecho, unido al espíritu comerciante de los fenicios, supuso que ya en el comienzo de la era cristiana, los vinos españoles se convirtieran en una de las mercancías más comunes en los intercambios comerciales del Mediterráneo y norte de África.

Serían los romanos los que continuarían la producción de vinos en la península, para lo que incorporaron sus métodos particulares de elaboración. Entre ellos destaca la crianza en ánforas de barro situadas en estancias altas y soleadas, y cerca de chimeneas. Al parecer, los caldos obtenían así texturas, sabores y fragancias de frutas y flores e, incluso, ahumados muy apreciados. La necesidad de abastecer al vasto imperio y sus legiones contribuyó a intensificar el ya notable tráfico comercial que habían alcanzado los vinos españoles.

El declive del Imperio Romano y la posterior invasión bárbara supuso un freno en el desarrollo de la viticultura en España. Las primeras hordas germánicas destruyeron muchas plantaciones de vid. Posteriormente, la llegada de los visigodos a la península contrarrestó la acción de los bárbaros. Mucho más civilizados que sus predecesores por el contacto con los romanos en las provincias limítrofes del Imperio, concedieron una gran importancia a la viticultura.

La llegada de los árabes en el siglo VIII también se tradujo en algunas dificultades para el desarrollo de la vid y la elaboración del vino debido a la prohibición coránica de consumir bebidas fermentadas y alcohólicas. Pese a ello, el cultivo de la vid continuó e, incluso, se mejoró durante el periodo de dominación musulmana. La primera causa se encuentra en la propia uva como fruta y su zumo: no había motivos para prohibir su consumo ni tampoco el del mosto sin fermentar. Por lo tanto, no se podía impedir su cultivo, al menos para los no musulmanes. La segunda causa es la conocida permisividad de algunas dinastías más liberales hacia los cristianos dominados, a los que permitieron continuar con el cultivo de sus viñedos y la elaboración del vino, sobre todo en los monasterios.

Sin embargo, no sería hasta después de la Reconquista por parte de los Reyes Católicos cuando se produciría el despegue definitivo de la vinicultura. Las comunidades religiosas y los monasterios que se fueron restableciendo jugaron un importante papel ya que serían los monjes y frailes los que más se afanaron en recuperar la tradición vinícola. El vino era un elemento imprescindible para sus ritos religiosos, aunque no se conformaron con el necesario para su culto, sino que se encargaron también de abastecer sus bodegas para alegría de los lugareños y peregrinos. De este modo, las viñas comenzaron de nuevo a florecer alrededor de los monasterios y abadías para extenderse posteriormente a otros terrenos.

A lo largo de los siglos siguientes el vino se convirtió en un alimento esencial en la dieta de la época, a lo que se unió la posibilidad de comercializarlo en lugares distintos a los de su producción. Este desarrollo de los flujos comerciales potenció el nacimiento de las distintas regiones vinícolas y se produjo así un considerable trasiego de municipios y regiones que se turnaron en el abastecimiento de vino a la Corte.

El siglo XIX es crucial en la industria vinícola española. Aunque tímidamente, comienzan a implantarse algunas reformas que tienen como objetivo la mejora de la calidad del vino y se implantan nuevas técnicas industriales de elaboración del vino que sustituyen a las tradicionales artesanales. Por otro lado, la desgraciada llegada de la filoxera al norte de Europa, que devastó progresivamente los viñedos a mediados de siglo, contribuyó a consolidar la vinicultura en España. Muchos vinateros franceses se establecieron al otro lado de los Pirineos como única forma para continuar con su medio de vida y trajeron consigo sus variedades de uva, maquinaria y métodos, entre los que destacaban la disposición de las cepas, el control de la fermentación o el sulfitado. Algunas de las plantaciones de Cabernet-Sauvignon y Merlot existentes en la actualidad en La Rioja y Ribera del Duero proceden de este tiempo.

Sin embargo, a finales del siglo la plaga terminó afectando a la península. Afortunadamente, en aquel momento ya se conocía la solución para acabar con ella: injertar sobre patrón americano, inmune a la plaga, con lo que la recuperación de las viñas y su producción resultó menos traumática que otros países europeos.

Ya en el siglo XX, la industria vinícola tuvo que enfrentarse a dos nuevos desastres. La Guerra Civil condenó a la viña al abandono y cuando el enfrentamiento acabó, la II Guerra Mundial supuso la paralización del mercado europeo del vino. Ambos sucesos supusieron un nuevo y duro golpe para el sector, que sólo a partir de los años cincuenta empezó a recuperar la normalidad. Desde entonces, las reestructuraciones de viñedos y la renovación y modernización de los procedimientos de elaboración y bodegas han caracterizado la actuación de los viticultores y vinicultores españoles, hasta situar a los vinos de España en igualdad de condiciones competitivas que los foráneos, tanto en el mercado nacional como mundial.

La transformación de la imagen y calidad de los vinos españoles durante el último cuarto del siglo XX ha sido notable. Un grupo de esforzados pioneros empezaron a introducir y aplicar las nuevas tecnologías vinícolas acordes con la modernización mundial del sector.

Especialmente en los últimos años, una nueva generación de maestros vinícolas ha sabido unir tradición y calidad con innovación dando lugar a caldos únicos de calidad inigualable que están conquistando el mercado mundial.



Cómo interpreter una etiqueta

LA ETIQUETA
La etiqueta es el carnet de identidad del vino en la que se detallan sus características personales y los aspectos de índole legal que la afectan. Es también su tarjeta de presentación, hasta el punto de que un diseño armónico, correcto y bien acabado puede llegar a vender más botellas que el propio vino que representa.

La etiqueta refleja la marca distintiva del vino (los españoles demuestran preferencia por los títulos de nobleza, como los franceses lo hacen por los "chateaux"), el registro embotellador, grado alcohólico, volumen contenido, identificación y localización de la bodega, denominación de origen y los registros de sanidad y de exportación, estando expresamente prohibido el que la etiqueta incluya cualquier dato que induzca a equivocación.

EL AÑO DE COSECHA
Indica el año en que se efectuó la vendimia. La razón fundamental de su presencia es asegurar que ese vino es diferente a otros en función de las circunstancias climatológicas que sufrió el viñedo.

Aunque en España ya es corriente que esté reseñada la fecha en la etiqueta, y a pesar de que en un gran número de casos debe cuestionarse la veracidad de la añada declarada, en Rioja y otras denominaciones de origen es fiable, ya que desde 1980 se realizan con rigor controles exhaustivos. Prácticas de mezcla de vino de diferentes cosechas, unidas al hecho de una climatología relativamente homogénea en años consecutivos en nuestro país, contribuyen a que no puedan apreciarse enormes diferencias entre las cosechas de distintos años.

LA SOLERA
La "solera" se obtiene mediante mezclas de cosechas como práctica legal. Generalmente, en las botellas donde aparece la palabra solera no se indica ninguna fecha, pero sí aparece impreso un año viejísimo acompañando al vocablo "solera". Quiere decir que en esa fecha se introdujo por primera vez vino en la barrica donde se crió, reponiéndose a medida que se iba extrayendo; por lo tanto es un vino de mezcla.

LA CONTRAETIQUETA
La contraetiqueta es el sello oficial del Consejo de la Denominación de Origen respectivo y su garantía de origen.

La contraetiqueta informa además del envejecimiento que ha experimentado el vino con las palabras Crianza, Reserva y Gran Reserva.

Desde 1980 es obligatorio que en los vinos de añada aparezca la fecha de cosecha, pero si el vino no es de crianza, puede figurar la frase "garantía de origen" para señalar su procedencia dejando con ello constancia de que no ha sido sometido a proceso de envejecimiento en barricas.

Las siglas CVC, hoy en regresión, significan "Conjunto de Varias Cosechas", es decir, que el vino es el resultado de la mezcla de diferentes añadas. Los vinos CVC suelen ser populares y no guardan relación con los vinos generosos envejecidos por el sistema de soleras.

TIPOS DE BOTELLAS
Actualmente en España se utilizan tres tipos de botellas que Francia adoptó para distinguir unas zonas vinícolas de otras. El modelo más extendido es el de la botella bordelesa, cilíndrica y alta, en sus dos variantes: la corta y la larga, que con sus tres centímetros más es la auténtica botella de Burdeos. El segundo tipo es la botella de Borgoña, la más antigua, ancha y corta, y el tercero es el envase del Rhin (su origen es alsaciano-germánico de las zonas ribereñas del Rhin), más delgado y alto, que se utiliza generalmente para los blancos y rosados.

LA CÁPSULA
La cápsula es la envoltura que cubre el gollete de la botella y tiene la misión fundamental de garantizar que el vino no ha sido descorchado con anterioridad. El plomo es el material más clásico (antes lo fue el lacre), aunque últimamente tiende a ser sustituido por materiales más inocuos como el estaño o el plástico, para evitar su posible toxicidad.

EL TAPÓN
El tapón del vino es de corcho, que es el material más noble, resistente y elástico encontrado hasta la fecha. Su longitud puede variar, desde los 44 milímetros hasta los 50 del corcho bordelés. El olor a corcho que encontramos en ocasiones en los vinos no está motivado por la naturaleza del propio corcho, sino por los mohos y bacterias que se depositan en él. Por otra parte, los diferentes grados de porosidad del material pueden propiciar la entrada de oxígeno en la botella y, por consiguiente, que el vino se deteriore, aunque esto no ocurre a menudo.

niedziela, 11 kwietnia 2010

Propiedades del aceite de oliva


Si bien no es un aceite barato comparado por ejemplo con el de girasol o el de soya, reporta beneficios muy significativos para la salud que merecen ser pagados. Les dará a las ensaladas un toque particular, siendo conveniente ir poniéndolo de a poquito para que el paladar se vaya costumbrando, pues el sabor es un poco más intenso que el de los otros aceites mencionados.

Para las personas que padecen problemas de colesterol alto es un gran aliado, ya que aumenta el colesterol bueno y disminuye el malo. Por su contenido de ácido oleico, al impedir el incremento de colesterol malo cuidará nuestras arterias y el funcionamiento cardíaco, siendo preventivo de la arteriosclerosis.

Posee además antioxidantes, lo que nos permitirá conservar la lozanía y juventud durante más tiempo al ser un gran protector celular, y por lo tanto tener propiedades antioxidantes, por su contenido en vitamina E.

Facilita la digestión, provee los ácidos grasos esenciales, combate el estreñimiento, baja la presión arterial, favorece la absorción del calcio, mejora el funcionamiento del aparato hepatobiliar; y colocado sobre el cabello, antes del lavado habitual, lo dejará brilloso y fuerte (sobre todo indicado para cabellos secos y quebradizos). En los niños y adolescentes estimula el crecimiento. ¿Le podemos pedir algo más?

piątek, 9 kwietnia 2010

Pasta a la marinera.




Esta receta española se hace con un marisco particular llamado chirla, para quienes no puedan conseguirla pueden reemplazarla por las almejas, que van muy bien.

Pasta a la marinera es un plato con sabor a mar, para disfrutarlo en una cena o un almuerzo al aire libre. Es bastante suculento, pero pueden hacer más liviano este plato reemplazando la mantequilla por rocío vegetal.


Ingredientes para 4 personas:

500 gr de pasta corta
1 kgr de chirlas
1 kgr de tomates
1 pimiento
1 cebolla
1 pellizco de orégano
1 pizca de azúcar
25 gr de mantequilla
50 gr de queso rallado

Preparación:

Comienza con la limpieza de las chirlas: lávalas 3 veces en distintas aguas para eliminar la presencia de cualquier agente externo. Luego las pones a hervir en abundante agua y les quitas sus conchas unas vez cocidas. En el agua de la cocción, hierve la pasta hasta que esté al dente y reserva.

En una sartén, realiza un sofrito la cebolla, el pimiento, ambos picados finamente, junto con el tomate. Añade una pizca de azúcar para quitar la acidez del tomate y condimenta con sal y orégano. Cocina hasta que el tomate se vuelva salsa.

En una olla con la mantequilla derretida, coloca la pasta, el sofrito hecho salsa y las chirlas. Cocina por 5 minutos, revolviendo para que no se pegue.

Sirve calentito y añade el queso rallado a cada plato al momento de servir, a gusto del comensal.

¡qué aproveches!

środa, 7 kwietnia 2010

Despues de la gula de Pascua ;)

Hoy quiero presentaros algunas recetas light, para aliviar nuestros estómagos ;)

Helado de crema light
Preparación:

Poner la gelatina a hidratar en media taza de agua fría.

Poner en el vaso de la licuadora la leche en polvo, la gelatina hidratada, las yemas, el agua, el edulcorante y la esencia de vainilla.

Licuar unos segundos y dejar descansar la preparación durante una hora, para luego verter en cubeteras y llevar al congelador.

Retirar un rato antes de servir, para que el helado se ablande un poco.



Revuelto de zapallitos light

Preparación:

Pelar la cebolla y cortarla en aros finos.
Lavar el ají, retirarle semillas y nervaduras y cortarlo en tiras finas.
Lavar los zapallitos, cortarlos al medio y luego en rodajas.

Calentar una sartén y agregar las cebollas y tiras de ají en seco, añadir inmediatamente sal para que suelten su jugo, removiendo un poco. Si es necesario, agregar chorritos de agua (poca) hasta que la cebolla se ablande un poco.

Incorporar los zapallitos y sobre fuego fuerte remover, mezclando con las otras verduras. Agregar sal y pimienta. Seguir cocinando hasta que los zapallitos estén cocidos, pero no blandos.



Calabaza rellena
Cortar la calabaza al medio, a lo largo. Poner a cocinarla en agua hirviendo con sal unos 10 minutos (que quede cocida a medias).

Quitar la pulpa de la calabaza, no toda, dejar más o menos un centímetro de profundidad adherido a la cáscara. Hacer un puré con la pulpa retirada.

Lavar la cebollita de verdeo, quitarle la parte más dura de las hojas y picarla finamente. Lavar, quitar las semillas y nervaduras del ají morrón y picarlo.

Calentar una sartén rociada con aceite en spray, incorporar el ají morrón y la cebollita de verdeo, salar y bajar un poco el fuego. Agregar el choclo, Cocinar unos 10 minutos, retirar y reservar.

Mezclar el puré de calabaza con el ají, la cebolla y el perejil. Agregar sal si es necesario y pimienta. Rellenar las mitades de calabaza y ponerles el pan rallado por encima.

Colocar en el horno calentado previamente y cocinar a temperatura moderada hasta que se gratine. Retirar y servir.

piątek, 2 kwietnia 2010



Como se acerca la Pascua en esta ocasión queremos desearos que la paséis muy bien y con mucho carińo. Que el domingo de Pascua os traiga paz, alegría y esperanzas:)

Rosquillas de Pascua.




Como se acerca la Pascua hoy os proponemos la receta para Semana Santa, es decir, las Rosquillas de Pascua:)


Ingredientes para 20 rosquillas:
- un huevo
- 3 cucharadas de azúcar
- 3 cucharadas de levadura en polvo
- 1 taza (café) de aceite de maíz
- 1 taza de harina de trigo
- cáscara rallada de ½ limón



Elaboración de las Rosquillas de Pascua:
Batir el huevo con el azúcar. Recuerda que por cada huevo usado se usa 3 cucharadas de azúcar. Agregar el aceite, la levadura y la ralladura del limón. Incorporar la harina poco a poco hasta que se forme una masa que no se pegue en los dedos.
Moldear con las manos bolitas del tamaño de una nuez grande, haciéndoles un hueco en el centro, formando aros. Freír las rosquillas en aceite caliente, dejar escurrir sobre papel absorbente y servirlas tibias o frías rebosadas en el azúcar. Prepararlas para el desayuno, para el postre o para la merienda.